La vida por defender la Tierra
En 2015 más de tres personas a la semana murieron asesinadas por defender su tierra, sus bosques y sus ríos frente a industrias destructivas. En el informe En terreno peligroso, elaborado por la ONG Global Witness, se documentan 185 muertes que sucedieron el año pasado por todo el mundo, una cifra que supone la más alta jamás registrada, y que representa más del doble del número de periodistas asesinados el año pasado.
Los países más mortíferos para los activistas de la tierra y el medio ambiente fueron Brasil, con 50 muertes, y Filipinas, con 33, que representan cifras nunca vistas en estos países, seguidos de Colombia (con 26 muertes), Perú (12), Nicaragua (12) y la República Democrática del Congo (11). Entre las principales causas de estos asesinatos se encontraban la minería (en 42 casos), la agroindustria (20), la tala (15) y los proyectos hidroeléctricos (15).
Los datos demuestran que 67 de los defensores de la tierra y el medio ambiente asesinados el año pasado pertenecían a comunidades indígenas, lo que supone la cifra más alta de la historia. Es el caso de la activista hondureña, Berta Cáceres, que fue asesinada el pasado mes de marzo en su propia casa (escribíamos ese día un post sobre su figura).
Peticiones
La organización internacional ha realizado varias peticiones a los gobiernos afectados, entre las que se encuentran el aumento de la protección de los activistas de la tierra y el medio ambiente que están en peligro de sufrir actos de violencia, intimidación o amenazas, así como la investigación de los delitos, incluyendo a sus «cerebros» corporativos y políticos aparte de a los asesinos, y llevar a los autores ante la justicia.