Un planeta sostenible solo será posible si hay igualdad
La gestión eficiente y eficaz de los recursos naturales de nuestro planeta necesita del conocimiento, compromiso y visión de las mujeres tanto como del de los hombres. El desarrollo de las soluciones tecnológicas con las que queremos frenar la emergencia climática cumplirá este objetivo si son construidos desde una perspectiva de inclusión e igualdad.
En este 2020, un año especialmente difícil para todos, la participación de las mujeres ha sido fundamental para hacer frente a la crisis sanitaria provocada por la Covid-19. El esfuerzo y las iniciativas con las que han dado respuesta ante la lucha de la pandemia, las posiciona en el liderazgo ante la adopción de acuerdos decisivos y eficaces proyectándose hacia un planeta sostenible.
La Fundación Acuorum, marca en el calendario un 8 de marzo más, para reivindicar la igualdad de género en el mercado laboral y estar en consonancia con el número cinco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.
Si bien la sensibilización está empezando a dar sus frutos, la segregación ocupacional aún existente sigue siendo mayor en los puestos técnicos y directivos. Según el primer informe del Observatorio ‘Mujeres, Ciencia, Innovación’ su presencia en el empleo en sectores de alta y media-alta tecnología es tan solo del 26%.
Por ello, necesitamos el talento de las ingenieras, científicas, investigadoras, físicas y de aquellas que ocupan puestos técnicos para diseñar una realidad verdaderamente sostenible y justa. No se puede construir una sociedad igualitaria pensada solamente por una parte de la población.
De esta manera, la Fundación Acuorum aporta su granito de arena, a través del proyecto de Becas Talento, mediante el cual se apoya el talento de los jóvenes con escasos recursos económicos para formarles en el ámbito de las ciencias, acompañándolos desde el Bachillerato hasta la Universidad.
¿Qué mejor día para homenajear a nuestras alumnas del proyecto Becas Talento? De los once estudiantes becados, siete son mujeres, lo que supondrá que un 63% de los estudiantes terminarán siendo “mujeres de la ciencia”.
